Uno de los
problemas de “México, el país de los criollos para los criollos”, es que
siempre, un puñado de poderosos iluminados, han tomado las grandes decisiones
de la NACIÓN sin tomar en cuenta a TODO el pueblo.
Los “otros”,
los nacos, indios, -¡vamos!-, como dijo la hija del Presidente, “la prole”, no
cuentan, son masehuales que su destino es obedecer, acatar, callar y si acaso decir:
“si patrón, para servir a usted”. Más nada, en este país nunca ha existido la
DEMOCRACIA.
Durante el
siglo XIX fue un reducido grupo de “gente de razón”, la que construyó “este
país” a su modo y conveniencia.
A los
descendientes culturales y raciales de los pueblos originarios siempre se les
ha tenido totalmente excluidos de la toma de decisiones y de las oportunidades.
Solo han sido
usados como carne de cañón en sus permanentes luchas fratricidas, voto duro
para avalar su “opereta bananera” que llaman democracia, como mano de obra
barata y como inconscientes consumidores de las porquerías y venenos chatarra
que producen “los industriales criollos”.
La dinámica de
las reformas estructurales, ha sido una burla grotesca, ilegal,
anticonstitucional, entrega vergonzante de la soberanía ante los poderes
fácticos y las empresas trasnacionales, en una palabra: traición a la patria.
“Ellos”, los
Iturbide, Limantour, Alemán, Degortari, Ponce de León, Fox, Slim, Chuyffet, Ebrad,
Chong, Meade, Chertorivski, Korenfeld, Videgaray, Coldwell, Massieu, Karam,
Carstens, Penchyna, etc., etc., etc., son los que conducen este país, … “su país”. La
Patria es de “ellos”, la Matria del pueblo.
“Ellos” toman
las decisiones y el pueblo no puede opinar y menos cuestionar, ellos son “el poder
y el saber”, nadie más que ellos, y solo ellos saben lo que es bueno para usted
y el país.
La gente no
sabe, no conoce, es ignorante. Pero en menos de 200 años han llevado a su país
de mal en peor, especialmente en los últimos 32 años.
“Ellos”
dijeron que debía tomar el gobierno los “tecnócratas” porque los políticos eran
pésimos administradores y corruptos: los tecnócratas resultaron peor.
“Ellos”
dijeron que era necesario expropiar los bancos, luego dijeron que era necesario
“rescatarlos” y luego regalarlos a los bancos extranjeros: perdimos la
soberanía financiera.
“Ellos”
dijeron que había que entregar (reglar) las empresas del Estado, para que
hubiera más trabajo, fueran más eficientes con precios más bajos: y se crearon
las mafias corporativas y los multimillonarios rapaces.
“Ellos”
dijeron que era necesario entrar al neoliberalismo y la globalización, que su
país no podía quedarse atrás: perdimos la soberanía económica.
“Ellos” dijeron
que era bueno convertir el país en una gran maquiladora, que ese era nuestro
lugar en la nueva economía mundial: se destruyó la pequeña y mediana empresa.
“Ellos”
dijeron que era necesario y bueno para su país entrar al TLC: se destruyó el
Mercado Interno.
“Ellos”
dijeron que se debería privatizar el ejido y modernizar el campo: perdimos la
soberanía alimentaria.
“Ellos”
dijeron que era necesario someterse política y económicamente a E.U.: quedamos
aislados de Latinoamérica y perdimos el lugar en el mundo que se había ganado
con la Doctrina Estrada.
“Ellos”
decidieron que el PAN debía gobernar: se desfondó el sistema político.
“Ellos”
decidieron que TELEVISA educara al pueblo: los niños aprenden de su bisabuelito
“Chavelo”, los jóvenes de Gloria Terevi, las señoras de Laura Bosso, los
señores de Brozo, los políticos de López Doriga y los intelectuales de Krauze.
Así es este
país, amable lector. Los que saben …saben, y “ellos” saben qué es lo mejor para
usted, para el pueblo y para el país (el de ellos por supuesto).
Ahora afirman
con sobrada experiencia y elevada sapiencia, con una “larga cadena de éxitos y
promesas cumplidas ampliamente al pueblo”, que: “Las reformas estructurales son
lo que se necesita para superar las limitaciones “históricas e ideológicas” del
país (su país).
Que usted
tendrá mejor empleo, ganará más dinero, que bajarán los precios de la gasolina,
el gas y la energía eléctrica, que habrá más empresas, más empleos y mejor
pagados.
¡Vamos!, que
nos espera un futuro próspero al entregar la riqueza energética a las voraces y
depredadoras empresas transnacionales (lo mismo dijeron con el TLC).
Aunque los
expertos, -nacionales y extranjeros-, afirman que es un gran error histórico,
que el país ira a la quiebra sin el 80% de la renta petrolera.
“Pese a quien
le pese y guste a quien le guste, la reforma va, dice Penchyna”.
Con sobrada
arrogancia y prepotencia del mayoriteo del PRIANVE, aquí se hace únicamente lo
que “ellos” dice. Si no piensa igual está usted totalmente descalificado por
televisa.
Lo más seguro,
amable lector, es que a final de este sexenio, “México, el país de los criollos
y para los criollos” estará en su peor crisis histórica, en lo económico,
político y social.
Los criollos
saldrán huyendo, -como ratas-, a sus países de origen cargados de sus riquezas
y estaremos peor que en 1821.
Dos siglos
perdidos…”pese a quien le pese” o “haiga sido como haiga sido”, según Penchyna
y Calderón.
duro con tra los traidores vendepatrias...despierta mexicano
ResponderEliminarArmando el caos, peleandonos entre nosotros mismos, es como llegan y nos quitan lo que es nuestro, antaño nuestro territorio, hoy nuestros recursos naturales, manañan sabra "Dios".
ResponderEliminarSi no les gusta lo que hacemos por México, ganen las próximas elecciones y punto.
ResponderEliminarPhoto SphereNo es cuestión de elecciones, sino de como se arrodillan ante los extranjeros y se les olvida que su obligación es la de construir y no vender.
ResponderEliminarEstimado Guillermo, más claro no podías expresarlo, serán los pueblos originarios los que tendrán la otra palabra...
ResponderEliminarVaya imbécil el que da entrever que el PRI es un instituto glorioso, cuando no es mas que una bodega de ladrones infelices sin limite en su voracidad y menosprecio para con su propio pueblo. Y así están todos esos partiduchos que conforman el engranaje político de este país campeón del desperdicio. Ganen las elecciones y punto; vaya ojete mas pueril y básico. Mira pedazo de mierda , haz de ser un beneficiario de la desgracia nacional, por que de otra manera no hablarías asi, echándole flores a un proceso nauseabundo llamado reformitas criollas. Es tan risible y pusilánime la manera de ¿gobernar? de dichos criollos que lo único que saben hacer es poner a la disposición de las potencias al Anáhuac y a su pueblo. Nada saben de negocios auténticos ni de innovación, mucho menos de la conciencia patriótica de querer levantar a nuestra nación del pobre nivel en todos los aspectos en que esta. Hablando a titulo personal a mi me gustaría que nuestro Anáhuac fuese un país mas dentro del concierto de las grandes potencias mundiales. Me llenaría de satisfacción ver a mi pueblo volverse un ente compacto, solido, fuerte, con un nacionalismo verdadero que le hiciere obtener lo que se propusiera, no ser lo que ahora me llena de enojo y frustración, un pueblo débil, sin conocimiento de si mismo y mangoneado por una partida de delincuentes cínicos , arrogantes que se creen intocables. Pero eso de que su proyectucho de país va a triunfar aun esta por verse criollos malditos. Todo puede pasar, desde levantamientos furiosos sin gran sentido, pasando por una guerra civil hasta una Revolución absoluta que le ponga fin a este periodo oscuro que inicio en 1521.
ResponderEliminar¿ como que le guste a quien le guste?¿ pésele a quien le pese? Que se creen estos ojetes que pueden hacer lo que se les venga en gana sin recibir un castigo. Están muy mal. Y errados en suma. No por que algo no se note ni se vea no existe. No todos somos agachones ni mexicanos vencidos hasta en el alma como la mayoría de los que viven en este país. No señores, no todos somos así. Somos parte de aquellos que entre las selvas, en el monte, en los cerros atiborrados de casas creemos que nuestra nación merece tener un lugar mas honroso en el mundo. Somos parte de aquellos que el día de hoy tienen una visión que hara volver la hombría y la fuerza a nuestros hermanos que han perdido todo deseo de lucha atacados por la aplastante colonización del extranjero , por esas ideas de que no somos mas que bestias que tributan con trabajo y sangre a la maquinaria de sometimiento del blanco y sus secuaces. Nosotros siempre hemos tenido el ardor de sabernos sometidos, humillados, subyugados en nuestra propia tierra. Cada afrenta tendrá que ser lavada con la sangre de nuestros enemigos, por que no es justo que aun hoy seamos esclavos en la tierra que antes era nuestra, y que estoy seguro algún día volverá a pertenecernos. Un día reconstruiremos desde la raíz nuestra hoy mancillada civilización, y la elevaremos hasta alturas inauditas. Esa es la visión que deberíamos tener todos los anahuacas; aquella que tenían nuestros viejos abuelos que ponían su corazón en su trabajo. La visión de una tierra libre de oscuras banderas de invasión , de rapiña y opresión. La visión del futuro. Una visión donde no cabe México, el país de los invasores y para los invasores. El país de los carteles genocidas, de los partidos inútiles, de la podredumbre total. Ese país tiene que desaparecer, no tiene futuro. Es deprimente que los jóvenes sigan a aquellos que cantan y festejan la destrucción de su propio pueblo, a ritmo de música norteña alaban su propia ruina y su frustración existencial. Eso refleja la total ausencia de valores y conciencia nacional, histórica, cultural que reina hoy en la sociedad. y también muestra que a casi quinientos años , la malinche sigue muy viva. Como es posible que alguien admire a quien lo pisotea, lo veja, le quita todo, en vez de que surja en el la sed de revancha y justicia que la lógica exige. Como no si desde chico le han enseñado a despreciarse a si mismo y a venerar a sus opresores. Y como no si no tiene conciencia de donde viene , ni de que fueron capaces sus antepasados. De esa manera surgen tantas escorias humanas que prefieren defender a lo establecido y participar en la matanza de sus hermanos, en vez de alzar su pecho y cabeza en contra del invasor. El Anáhuac esta hasta la madre de gente como esa, lo que le urge que surjan son defensores de esta tierra. Guerreros incansables que no escatimen esfuerzos para detener al invasor y a sus aliados. Le faltan panchos villas, emilianos zapatas,jacintos caneks, eso es lo que hace falta a nuestro país, no mas émulos del chapo o Slim. Se necesita de héroes, caudillos que amen al Anáhuac por encima de todo y que estén dispuestos a todo por ver este país libre. Se necesita gente que sea capaz de destrozar aquello de pésele a quien le pese y le guste a quien le guste.
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