No es ético,
justo y moral que mientras a todos los trabajadores se les somete de una forma
u otra a una evaluación exista un gremio de parásitos nocivos a la sociedad que
medran de ella, la maleducan y la corrompen.
Nadie evalúa
su desempeño, no se les audita el manejo
de recursos y menos se analizan sus estrepitosos fracasos que siempre traen
descalabros económicos, políticos y sociales de gran envergadura a la nación.
Son, por
decirlo de la manera más tenue, una elite amafiada que se cubre unos con otros
y que a pesar de cometer cuantiosos fraudes o crímenes de lesa humanidad, jamás
se les ha llamado a cuentas y mucho menos se les ha castigado.
Por supuesto
nos referimos a la clase política de todos los colores.
Siempre, desde
el pulpito del poder, es decir, -los medios masivos-, anuncian al pueblo
medidas o acciones que “salvarán o mejoraran” el nivel de vida del pueblo y
siempre, por su incapacidad, mediocridad o corrupción.
Estas
“grandes” reformas, nuevas leyes, “medidas dolorosas”, nuevas instituciones, programas,
iniciativas, resultan contraproducentes o definitivamente terminan siendo un
estrepitoso fracaso que paga el pueblo de México.
Se abusa de
la falta de memoria histórica de la sociedad.
Un día se nos
dijo que se reformaría el sistema político de México y que vendrían a salvarnos
los “tecnócratas” porque los políticos eran ineptos y corruptos, a final de
cuentas han resultado peores los tecnócratas y ahora se han vuelto una pavorosa
mezcla.
Un día nos
dijeron que era necesario nacionalizar la banca y fue un fracaso, entonces la
entregaron a sus cómplices los “bolseros” y éstos la quebraron haciendo
fraudulentos préstamos, entonces con el Fobaproa el pueblo adquirió una deuda
impagable para “rescatarla” y saneada se les entregó a la banca extranjera.
Un día se nos
dijo que teníamos que entregar a precio de regalo las empresas del gobierno
porque representaban una gravosa carga para el contribuyente porque las
empresas estaban mal administradas y quebradas, así se entregó Telmex, TV
Azteca, Puertos, Aeropuertos y todo el patrimonio de los mexicanos a los amigos
y socios de la mafia.
Un día nos dijeron
que la economía nacional sufría de un “catarrito” y resultó una pulmonía fulminante
de la cual todavía no se recupera la economía.
Un día se
cambió la Constitución para que un hijo de extranjero pudiera ser presidente…y
llegó Fox.
Un día los
políticos mexicanos en negociaciones secretas con E.U. “desaparecieron” la Isla
Bermeja para cederle los derechos de mar patrimonial y compartirles la “dona
petrolera” del Golfo de México.
Un día
desaparecieron violentamente la dirigencia del STPRM de “la Quina” y sus
secuaces para democratizar al sindicato y pusieron a otra banda peor dirigida
por Romero Deschamps.
Un día
firmaron el más pernicioso tratado comercial que destruyó la economía nacional
y nos dijeron que el TLC mejoraría el nivel de vida del pueblo.
Un día nos
dijeron que el programa CONASUPO era un desastre y la distribución de
mercancías al pueblo se las entregaron a las grandes cadenas de tiendas de
autoservicio.
Un día nos
dijeron que el ejido era un obstáculo para el desarrollo económico y se
privatizó la tierra creando la destrucción del campo y la migración a las
ciudades.
Un día nos dijeron
que por el bien de México nuestra única forma de insertarnos en la economía
global era como país maquilador y se destruyó la industria mexicana.
Un día nos dijeron
que el movimiento indígena del EZLN era dirigido y financiado desde el exterior
y que Marcos y Samuel Ruiz eran oportunistas que trataban de independizar
Chiapas usando a “los ignorantes indígenas” para justificar su represión.
Un día nos dijeron
que era mejor entregar la dirección económica a las poderosas instituciones
supra nacionales y perdimos la soberanía económica, financiera, educativa y de
investigación.
Un día nos dijeron
que la alternancia de los partidos políticos en el poder era lo que sacaría a
México del atraso y la corrupción y el PAN resultó más corrupto e inepto que el
PRI.
Un día nos
dijeron que buscarían a la gente más preparada del país para trabajar en el
gobierno y resultaron los “seleccionados” los más mediocres y corruptos.
Un día nos
dijeron que la única manera de detener al narcotráfico era utilizando al
ejército, la tropa está en las calles y se empeoró el problema.
Nos acaban de
decir que la vuelta del PRI es lo mejor para el país y la economía sigue en
picada y “la guerra de Calderón” sangrando el país.
Ahora nos
dicen que las reformas estructurales del Pacto por México es lo único que puede
activar la economía y salvarán a la nación.
La pregunta
más lógica y necesaria es, cómo se puede garantizar que “ahora sí” será verdad, que esta vez, -sí será cierto-, que
no volverá a ser otro engaño y otro fracaso más.
Si los que
están orquestando estas reformas son los mismos de ayer, comenzando con el
“jefe de jefes”, Carlos Salinas totalmente denostado por la mayoría del pueblo y
que dejó al pueblo y gobierno siguiente en una crisis económica y política de
la que todavía no sale el país.
Gente cono
Salinas tiene en su haber oscuras escenas del pasado como el asesinato de
Colosio y su familia debe muchas explicaciones con casos de corrupción y
asesinatos de políticos.
Pero también
Emilio Chuayffet no tiene clara su intervención en la matanza de Acteal por la
cual fue destituido por Zedillo
o el mismo
Enrique Peña Nieto, con la brutal represión de Atenco y una llegada turbia al
poder y en su gabinete existe gente que los medios de E.U. los vinculan con
narcotráfico.
Se debería
comenzar por “evaluar” el desempeño profesional de los reformadores para darle
credibilidad a sus reformas.
Que el buen
reformador con sus barbas comience.
Visite www.toltecayotl.org
5 comentarios:
Mi solidaridad con el verdadero pueblo mexicano. Repruebo a los déspotas que copian un modelo inhumano piramidal sin personalidad y que sólo se dedican a la macroeconomía
Un saludo...
Yo los evaluo como TRAIDORES VENDEPATRIAS,POLITICOS CORRUPTOS INEPTOS Y NEPOTISTAS. me falta algo?
bien dicho, si se tiene que hacer...pero quién le pone el cascabel al gato????
Bien dicho, son el mismo mal de este país...
Desde la región austral del Continente Americano el pueblo trabajador de Argentina está con los compañeros maestros de México en su justa y democrática lucha.
Aldo Justián.
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