Como persona, como familia y como pueblo, somos lo que recordamos. El cúmulo de recuerdos son nuestra “historia personal” y esta historia, es lo que nos hace ser lo que somos. La memoria de nosotros mismos es “nuestra identidad”.
La conciencia de ser, está sustentada en la memoria y ambas proyectan “nuestra autoestima”. Somos lo que recordamos. Quien tiene recuerdos, tiene historia y quien tiene historia posee identidad. Quien tiene identidad posee autoestima. Sabe quién es, de dónde viene y a dónde va. Es dueño de su destino y su vida tiene “un propósito”. Sabe lo que quiere y lo que no quiere. Sabe de dónde viene y a dónde va.
Pero sí una persona, una familia o un pueblo, pierden sus recuerdos o bloquen su capacidad de “recordar”, dejarán de ser quienes son y se diluirán en la nada. Tendrán conciencia de ser y de existir, pero no sabrán quienes son, ni qué quieren y qué no quieren.
Una de las maneras más efectivas de reducir a nada a una persona, a una familia o a un pueblo, es quitarle su memoria histórica. Que no sepa cuáles son sus orígenes, cuáles los procesos que ha vivido, cuáles las experiencias que ha tenido. Cuando una persona sufre un trauma y resulta con amnesia, es decir, no recuerda nada de su vida, no sabe quién es, ni qué esta haciendo. Esta persona queda en un peligroso estado de indefensión. Se convierte fácilmente en una víctima de cualquier agresión o presión. Se le puede engañar y manipular fácilmente.
Los mexicanos somos un pueblo que a pesar de tener una herencia histórica y cultural inconmensurable, no tenemos memoria histórica. No recordamos, no conocemos, somos “ajenos a nosotros mismos”. El pueblo de México vive indefenso y vulnerable.
No sabemos nada de nosotros y no nos interesa saberlo. Pareciera que la SEP, desde 1921 vacunó a todos los maestros y estudiantes del país, para que la historia fuera una materia aburrida y sin sentido. Los mexicanos en general se sienten ajenos y distantes a la aburrida, inconexa y confusa “Historia Oficial”. El gobierno se ha encargado de secuestrarle la HISTORIA al pueblo. El “panismo Foxiano” quitó de la secundaria la historia antigua de México.
El enriquecimiento abusivo se sustenta en la ignorancia. El mejor negocio es embrutecer y convertir a las personas, a las familias y a los pueblos en ignorantes de sí mismos. La ignorancia es el mejor negocio de México. Le apuestan a la ignorancia todas las fuerzas que pretenden sacar ganancia del pueblo. Le apuestan los políticos y los partidos políticos, le apuestan las empresas nacionales y extranjeras, los sindicatos y el crimen organizado. Le apuestan los medios masivos, especialmente la televisión y la radio comercial, quienes son los primeros y más eficaces medios para embrutecer, enajenar, engañar al pueblo.
En efecto, estos medios electrónicos son los que están “verdaderamente educando” al pueblo de México, con la complacencia y complicidad de TODOS LOS PODERES. Exaltan la bajeza, la vulgaridad, la violencia, el consumismo, el malinchismo. Imponen “modas”, valores, actitudes, formas de hablar, de sentir y de ser de la gente. Los medios han logrado que el común de la gente pretenda ser un “gringo de tercera” en vez de un mexicano de primera.
Perdidos en “el laberinto de la soledad”, los mexicanos desculturizados, agringados, consumistas, buscan “ser alguien” y “hacer algo en la vida”, como se los inculcan los medios masivos. Sin memoria histórica, sin identidad, sin valores propios vagan penando de quincena en quincena la miseria de tratar de “ser alguien” a través del consumo. Indefensos, violentos, vulnerables, vulgares, inseguros, frustrados, ven como perdemos con Haití y con Honduras…”llando siempre todos los penaltis”. Condenados eternamente al subdesarrollo y a la pobreza. Mientras unos cuantos extranjeros se hace multimillonarios a partir de su ignorancia y su desolación. http://www.aquioaxaca.com/
1 comentario:
opino lo mismo y muy acertado tu coment. Me quede muy sorprendida cuando supe que a mi hermana le habian quitado la materia de historia pues a mi en lo personal la asignatura siempre me gusto, mi papa es maestro de historia y me transmitio el gusto por ella, estoy de acuerdo en que nos roban la identidad y es muy objetivo tu punto, pero creo que lo que el mexicano necesita es tambien un cambio de paradigmas, pues es importante la imagen que uno tiene de si, como persona, como pueblo...esos maestros inyectados de pesimismo forman mexicanos miedosos que no hacen mas que confirmar esta fuga de seguridad...
en fin, gracias a dios existen personas obetivas como tu que pueden manifestar sus ideas para compartirla con otros!
salud por eso!!
Publicar un comentario