lunes, 3 de diciembre de 2007

LOS PRESIDENTES QUE NO ESCUCHAN A SUS PUEBLOS.


Mientras en Venezuela se convoca a la nación a decidir sí se impone el proyecto político de Hugo Chávez, y este pierde por casi nada y se respeta la voluntad del pueblo; en México, la clase dominante en el poder económico y político se confabuló para hacer un mega fraude a por lo menos la mitad del pueblo.


Mientras en Venezuela se toleró el abuso, la parcialidad y la intromisión tendenciosa de Radio Caracas Televisión (la televisa de allá) en contra de Chávez y solo se le negó la renovación de la concesión; en México, el gobierno auspicia la toma y asalto armado de Canal 40 a manos de TV Azteca, toda vez que el canal era crítico al gobierno.


Mientras en Venezuela se nacionaliza la riqueza producida por el petróleo, que estaba en manos de una casta divina entregada a Estados Unidos y se invierten los cuantiosos recursos en el desarrollo social; en México, los vendepatrias quieren privatizar PEMEX y CFE y entregarlas a empresas extranjeras.


Mientras en Venezuela se crean instituciones y se legisla a favor de las clases trabajadoras y desposeídas, en México, se les quitan a los trabajadores sus prestaciones, se les da un miserable aumento, se les roba sus pensiones y se trata a toda costa de destruir, desde adentro, las instituciones de seguridad social para privatizarlas.


Mientras en Venezuela se crean instituciones educativas, se apoya a la educación; en México, se reducen los presupuestos, se boicotea la educación pública y se politiza la educación.
Mientras en Venezuela se están creando iniciativas gubernamentales a nivel nacional para sacar de la pobreza, la injusticia y la marginación a los pobres; en México, se subsidia a los ricos, se les exenta de impuestos, se les reglan las empresas del Estado y se criminaliza las manifestaciones de rechazo a la injusticia y a los abusos de poder.


Pero sobre todo, el gobierno venezolano se enfrenta a los abusos de las grandes empresas trasnacionales y los países colonizadores, como Estados Unidos y España; en México, nuestros gobernantes se han convertidos en personeros y empleados de estas mega fuerzas, haciendo un papel de esquirol y golpeador, pero al mismo tiempo, acabando con la soberanía y la autodeterminación. El triste papel de los gobernantes mexicanos en el plano internacional en los últimos tiempos resulta patético, están destruyendo totalmente la Doctrina Estrada, la no intervención y el liderazgo que México se ganó a pulso, desde la Revolución. Hoy somos unas “changuitos inofensivos”, cómica e ineficiente comparsa de los neocolonizadores en los foros internacionales.


Lo que sucedió este domingo en Venezuela es una inmensa lección de democracia a Estados Unidos y México, que tienen dos presidentes con elecciones cuestionadas y de dudosa transparencia. Los medios al servicio de “los Mercaderes” se han cansado de poner a Chávez como un dictador …y ¡qué lección les ha dado! Respetó el voto de sus oponentes, como no lo hizo Bush y Calderón.


El proyecto bolivariano de Chávez, puede ser cuestionado, no tanto por sus fines, sino por la forma en la que se está tratando de hacerlo. Es decir, quieren crear una Quinta República diferente…con los vicios sociales y políticos de la Cuarta República. Tienen muchos errores internos y traiciones. Amable lector, usted sabe que siempre en todo el mundo, los arribistas y oportunistas saben caer parados en cualquier sitio en las revoluciones. Esa clase de gente es la que hecha a perder todo movimiento y transformación social, y de esos, también hay en Venezuela.


Pero lo importante es que es una gran mayoría del pueblo es la que está de acuerdo con la Revolución Bolivariana. Por supuesto, es lógico entender que las clases altas y medias, que habían sido favorecidas por el anterior sistema, estén que trinan contra Chávez y su revolución. Todos los que tenían privilegios en el antiguo régimen, están en contra de Chávez. Pero existe un enemigo más importante que esta oligarquía, miope, ignorante y abusiva. Los intereses de Estados Unidos y España están siendo lastimados por los regímenes nacionalistas e indigenistas como los de Venezuela y Bolivia, pero le siguen atrás Ecuador, Argentina, Perú y una convulsionada Brasil.


Estados Unidos tiene, más que una campaña permanente en contra de la democracia venezolana, están naciendo lo imposible, lo ilegal, lo sucio, por derrocar a Chávez. El pueblo por amplia mayoría le ha dado el poder a Chávez y por escaso margen, le negó su “sueño bananero” de quedarse en la presidencia hasta el 2050, pero Estados Unidos y las empresas trasnacionales NO LO QUIEREN EN EL PODER y permanente y abiertamente lo quieren derrocar o asesinar.
Es curioso, pero cuando existe una democracia que no esta a favor de los intereses de Estados Unidos, de inmediato es derrocada por la CIA. Las democracias para que se sostengan “en el mundo libre”, tienen que ser incondicionales de los intereses de los mercaderes.


Lo que sucedió el domingo en Venezuela nos debe enseñar que todo lo que la maquinaria golpista de E.U. dice de Chávez…no es tan cierto, y que, en Venezuela, más que en México y Estados Unidos, el pueblo pude detener los intereses de los que están en el gobierno y tiene la real-posibilidad de decidir. En México Calderón no escuchó, “el voto por voto” y en E.U. Bush no escucha a su pueblo en el, “no a la guerra de Irak”.


Este “NO” a Chávez y a la Revolución Bolivariana debe ser, también para los chavistas, un respaldo de que se desarrolla una verdadera democracia, pese al intervensionismo de los mercaderes internacionales. Pero también una llamada de atención, de que el pueblo “duda” de la eterización de un hombre en el poder. Muy pocos pueblos en el mundo pueden decidir…como el domingo lo hizo el pueblo venezolano.

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