En California, Estados Unidos la resección es una realidad. La cantidad de casas en venta por cualquier vecindario es sorprendente. En días pasados visité un conjunto de tiendas que están en el free way 15, en el que las grandes empresas venden sus propios saldos. Ahí están “las mejores marcas” a lo más bajos precios…aunque sin el surtido deseado. Cual fue mi sorpresa que una tercera parte de las tiendas estaban cerradas. La economía anda mal y de malas. La guerra ha agotado los recursos del erario y se están sacando fondos de los programas sociales, educativos y de salud.
Pero como siempre, el problema estalló por la parte más débil…el ciudadano común. En efecto, resulta que hace unos años los bancos empezaron a prestar dinero a diestra y siniestra, bajo el amparo de una burbuja especulativa en los bienes inmobiliarios.
La oferta de dinero era enorme con muy bajos intereses, pero como siempre y con letritas pequeñas, estos intereses estaban sujetos a la variación de las tasas de interés del mercado. De modo que una persona podía conseguir muy fácilmente un préstamo para comprar una casa con un valor, supongamos, de doscientos mil dólares.
Pero en E.U. el concepto de “una casa” es diferente que para nosotros. Para ellos es “una inversión”, para nosotros es nuestro HOGAR y un patrimonio para nuestros hijos. De modo que en la tierra del “Becerro de Oro”, la gente regularmente puede “retirar de su inversión” parte de “la plusvalía” que se esta generando.
De esta manera, aquélla persona que dio el enganche de una casa de 200 mil dólares en poco tiempo, debido a la burbuja especulativa, “su casa” ya valía 400 mil, por lo cual inmediatamente pidieron al banco un préstamo hipotecario sobre la casa de, por ejemplo, 200 mil dólares.
En pocos años los intereses suben estratosfericamente y sí antes pagaban 2 mil dólares mensuales de la hipoteca, ahora tienen que pagar 5 mil. Pero además se desploma el mercado de casas (por lo mismo) y la casa que compró en 200 ahora vale 180 y debe en total 400 mil dólares. Lo que está haciendo la gente con el dolor de su corazón y llenos de frustración es tener que dejar las casas. Los bancos perdieron porque prestaron sobre algo ficticio y ellos perdieron la casa, porque compraron expectativas de consumo ficticias.
Sumándole a todo esto el histórico déficit presupuestal del gobierno federal, que está creando una inflación mundial, pues E.U. emite más dólares de los que respalda su economía para pagar todos sus gastos…especialmente los de guerra, resulta que cada día vale menos el dólar, el euro y el petróleo sube más.
Esta inflación mundial, la Unión Europea la supera mejor al tener su propia moneda fuerte y no estar dependiendo del dólar, pero los demás países que sostienen su moneda con el dólar, cada día su moneda vale menos. Por lo cual, cada día, las cosas que compran cuestan más y las que venden cuestan menos.
Esta gran ola inflacionaria esta por llegar al país. Nuestros cleptómanos y demagogos políticos afirman que no le afectará a México, que ya “blindaron la economía”. Están por el contrario, peleándose unos contra otros y todo contra todos por las migajas de la corrupción económica. Les “urge entregar” el petróleo a sus amos trasnacionales, los dueños del dinero.
Pero esta inmensa ola arrasará la pobre y endeble economía nacional. Lo que están haciendo nuestros dirigentes es verdaderamente suicida. Tenemos dos fuentes de ingresos de los devaluados dólares. Una es por las remesas de los migrantes, que como están sufriendo allá la recesión y las medidas fronterizas, cada día están enviando menos dinero.
Pero por otra parte, el petróleo que en estos momentos se va para arriba, toda vez que es como “oro liquido”, pues su valor no esta sujeto al dólar, los traidores históricos, los criollos, se lo quieren entregar a los dueños del dinero, engañando al pueblo con mentiras pueriles e insostenibles. Como dijo Creel, “el PAN está dispuesto a pagar el costo político” de esta entrega.
Pero resulta que como México es una COLONIA, no un país…no hay ningún costo político. Desde Santa Anna, los criollos en el poder hacen lo que se les da la gana en “su país” y nunca toman en cuenta al “México profundo”. Los pobres, los morenitos, los hijos de la conasupo, solo están para obedecer y aguantar. Más nada. Lo mismo dijeron los priístas del “costo político” con el FOBAPROA, con el IVA o el asesinato de Colosio…nada pasó, en el país de los criollos…no hay costos políticos, por la sencilla razón de que es una Colonia.
Pero como siempre, el problema estalló por la parte más débil…el ciudadano común. En efecto, resulta que hace unos años los bancos empezaron a prestar dinero a diestra y siniestra, bajo el amparo de una burbuja especulativa en los bienes inmobiliarios.
La oferta de dinero era enorme con muy bajos intereses, pero como siempre y con letritas pequeñas, estos intereses estaban sujetos a la variación de las tasas de interés del mercado. De modo que una persona podía conseguir muy fácilmente un préstamo para comprar una casa con un valor, supongamos, de doscientos mil dólares.
Pero en E.U. el concepto de “una casa” es diferente que para nosotros. Para ellos es “una inversión”, para nosotros es nuestro HOGAR y un patrimonio para nuestros hijos. De modo que en la tierra del “Becerro de Oro”, la gente regularmente puede “retirar de su inversión” parte de “la plusvalía” que se esta generando.
De esta manera, aquélla persona que dio el enganche de una casa de 200 mil dólares en poco tiempo, debido a la burbuja especulativa, “su casa” ya valía 400 mil, por lo cual inmediatamente pidieron al banco un préstamo hipotecario sobre la casa de, por ejemplo, 200 mil dólares.
En pocos años los intereses suben estratosfericamente y sí antes pagaban 2 mil dólares mensuales de la hipoteca, ahora tienen que pagar 5 mil. Pero además se desploma el mercado de casas (por lo mismo) y la casa que compró en 200 ahora vale 180 y debe en total 400 mil dólares. Lo que está haciendo la gente con el dolor de su corazón y llenos de frustración es tener que dejar las casas. Los bancos perdieron porque prestaron sobre algo ficticio y ellos perdieron la casa, porque compraron expectativas de consumo ficticias.
Sumándole a todo esto el histórico déficit presupuestal del gobierno federal, que está creando una inflación mundial, pues E.U. emite más dólares de los que respalda su economía para pagar todos sus gastos…especialmente los de guerra, resulta que cada día vale menos el dólar, el euro y el petróleo sube más.
Esta inflación mundial, la Unión Europea la supera mejor al tener su propia moneda fuerte y no estar dependiendo del dólar, pero los demás países que sostienen su moneda con el dólar, cada día su moneda vale menos. Por lo cual, cada día, las cosas que compran cuestan más y las que venden cuestan menos.
Esta gran ola inflacionaria esta por llegar al país. Nuestros cleptómanos y demagogos políticos afirman que no le afectará a México, que ya “blindaron la economía”. Están por el contrario, peleándose unos contra otros y todo contra todos por las migajas de la corrupción económica. Les “urge entregar” el petróleo a sus amos trasnacionales, los dueños del dinero.
Pero esta inmensa ola arrasará la pobre y endeble economía nacional. Lo que están haciendo nuestros dirigentes es verdaderamente suicida. Tenemos dos fuentes de ingresos de los devaluados dólares. Una es por las remesas de los migrantes, que como están sufriendo allá la recesión y las medidas fronterizas, cada día están enviando menos dinero.
Pero por otra parte, el petróleo que en estos momentos se va para arriba, toda vez que es como “oro liquido”, pues su valor no esta sujeto al dólar, los traidores históricos, los criollos, se lo quieren entregar a los dueños del dinero, engañando al pueblo con mentiras pueriles e insostenibles. Como dijo Creel, “el PAN está dispuesto a pagar el costo político” de esta entrega.
Pero resulta que como México es una COLONIA, no un país…no hay ningún costo político. Desde Santa Anna, los criollos en el poder hacen lo que se les da la gana en “su país” y nunca toman en cuenta al “México profundo”. Los pobres, los morenitos, los hijos de la conasupo, solo están para obedecer y aguantar. Más nada. Lo mismo dijeron los priístas del “costo político” con el FOBAPROA, con el IVA o el asesinato de Colosio…nada pasó, en el país de los criollos…no hay costos políticos, por la sencilla razón de que es una Colonia.
De modo que los resignados y empobrecidos mexicanos, debemos prepararnos para otro “error de diciembre”. Ya nos dirán de nuevo que, la desgracia fue por “la Luna llena, como en Tabasco o por una diarrea, como en Veracruz”…pero de que está por llegar la ola del tsunami económico…esta por llegar. Prepárese amable lector...